Hoy viajamos a tierras vecinas, a la provincia de Jaén y Albacete, para adentrarnos en la majestuosa Sierra de Alcaraz y Sierra de Segura, y descubrir una de sus cumbres más simbólicas: la Peña del Cambrón, también conocida como Piedra del Cambrón.
Visible desde diversos puntos del Campo de Montiel, esta atalaya natural se eleva como un faro pétreo que marca la frontera entre Jaén (Andalucía) y Albacete (Castilla-La Mancha), siendo una referencia geográfica y paisajística para toda la comarca.
La Peña del Cambrón, situada a 1.552 metros de altitud, ofrece una de las panorámicas más extensas y espectaculares del sureste peninsular. Desde su cumbre, los días claros permiten abarcar territorios de Jaén, Albacete, Ciudad Real y Granada, un hecho que convierte este enclave en uno de los balcones naturales más impresionantes del entorno.
En lo más alto encontramos dos casetas de vigilancia contra incendios, una andaluza y otra castellano-manchega, atendidas por profesionales cuya labor garantiza la protección de estos montes milenarios.
Subir hasta la cima es adentrarse en un universo de silencio, aire puro y belleza sin filtros. Desde allí, el entorno se despliega en un mosaico de sierras y parajes: los Llanos de Albaladejo, La Sarga, El Padroncillo, el Calar del Mundo, el Cerrico de las Mentiras, El Puntal, los Calarejos, El Yelmo, las Cumbres de Beas de Segura, la Sierra Oruña y el Embalse de Siles. Un lienzo verde e interminable que invita a contemplar sin prisas y a sentir la grandeza de la naturaleza en estado puro.
La Peña del Cambrón pertenece al término municipal de Siles, el pueblo más oriental de Andalucía, muy cercano a la aldea de Onsares (Villarrodrigo). Es una zona rica en biodiversidad, enclavada dentro del Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas junto a la Sierra de Alcaraz, uno de los espacios protegidos más extensos de España.
Los ascensos más habituales parten de Onsares, Villaverde del Guadalimar, El Bellotar y La Pendolera. Cada ruta ofrece su propio encanto: senderos que zigzaguean entre pinares de montaña, antiguos caminos de herradura, vistas continuas hacia los calares y pequeños rincones donde los ciervos, cabras montesas o rapaces pueden aparecer en cualquier momento.
Entre las rutas recomendadas, destaca la ascensión desde Onsares, una de las más conocidas, con un tramo final exigente pero con vistas inmejorables hacia el Calar del Mundo. La subida desde Villaverde del Guadalimar es ideal para quienes buscan un recorrido más progresivo y con amplias zonas de sombra. Por su parte, las rutas desde El Bellotar o La Pendolera discurren por terrenos más tradicionales, perfectos para senderistas que disfrutan de caminos rurales y del ambiente serrano más auténtico.
Algunos consejos prácticos antes de emprender la subida: llevar agua suficiente, ya que no hay fuentes en la parte alta; utilizar calzado de montaña, especialmente en épocas húmedas; evitar los días de fuerte viento debido a la exposición de la cumbre; y considerar la posibilidad de madrugar para disfrutar del amanecer o llegar a última hora del día para contemplar el atardecer sobre el Campo de Montiel. También es importante respetar la fauna local y la señalización relacionada con la prevención de incendios.
Si aún no has visitado esta joya natural tan cercana al Campo de Montiel, es el momento de hacerlo. La Peña del Cambrón no es solo una montaña: es una experiencia, una ventana inmensa abierta a la belleza del sur.
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